domingo, febrero 11, 2007

DIALOGO CON LA NEURONA DE SUMERCE EN CINCO ACTOS


PRIMER ACTO: Noticia vs. Neurona


Amaneció y, la verdad estoy mamada con el despertar noticioso de la Hacienda y la opinadera de la neurona de Sumercé, abro el ojo y…?: Rescatado el Capitán Nur… ¿Capitán Nur?, ¿quién es el capitán Nur? Arranca a preguntar la neurona de Sumercé. Un momento que viene el desarrollo de la noticia —así dicen en la Hacienda, “desarrollo de la noticia”, lo otro son titulares o fórmulas para enganchar radioescuchas que acompañan con una musiquita angustiante y acelerada—, entonces la tensión para oír la agitada voz del presentador de noticias se eleva hasta parecer inaguantable. Pero no, no hay de qué preocuparse, porque los locutores en el mismo tono anuncian, Juan Pablo Montoya ocupó un lugar, el que caiga, en la Nascar; asesinada madre de tres niños en el corregimiento de no sé dónde que está ubicado en no sé qué parte de esta Hacienda. Todo lo vociferan igual.

Si el Papa pide por los secuestrados, gritan; si la reina de la papaya se levanta la falda, gritan; si el Patrón conversa con Chávez, gritan; si los ecuatorianos, tan delicados ellos, protestan porque les están fumigando con el inocuo glifosato aumentan los decibeles de los gritos; si se prepara un desfile de modas gritan y ni qué decir de los alaridos que pegan cuando la selección, nuestra selección, la que lleva el tricolor de la paaaaaatria en el pecho, aquella que siempre pierde, juega.

Gritan porque estamos a un pelo de clasificar a la segunda ronda de una final y la cosa luce sencilla amables oyentes, sólo necesitamos que Venezuela le dé sopa y seco a Brasil, que le marque cinco goles a la selección del jogo bonito, ¡una pendejada!, y clasificamos. Bueno, clasificamos siempre y cuando la otra condición también se haya dado, que en el partido previo, entre las selecciones de Bolivia y Argentina, hayan expulsado tres jugadores argentinos y así, con un equipo de ocho jugadores contra once, Bolivia empate cero a cero con Argentina, si esas bobaditas se cumplen, clasificamos. ¡Por eso gritan!, ¡porque estamos a un pelo de clasificar! Coloooombiaaaaa es liiiinda, te queremos.

Aquí gritan los locutores de radio y gritan también quienes presentan los noticieros de televisión. Cómo si no bastaran las caritas que hacen al leer las noticias y la mirada de angustia, aceleran las palabras y suben el tono de voz para decir, la señorita xx declaró que jamás se ha practicado ninguna cirugía en su busto, que es natural, no se pierda en unos minutos el análisis de tres expertos cirujanos que confirmarán si la talla 40 del busto de la señorita xxx es o no natural. Y de nuevo la musiquita alarmante. ¡Qué cosa! Hasta para anunciar una margarina gritan. El método (grito + musiquita) será tormentoso pero consigue su objetivo: uno queda ahí, pegado del techo, literalmente pegado del techo, con las greñas paradas, soportando la algarabía de los comerciales, para saber si la señorita de no sé dónde tiene o no 15 kilos de silicona en cada seno, para oír al profe (aquí todos los comentaristas deportivos son profesores, ¿de qué?, no se sabe, pero profesores sí) haciendo sus cálculos sobre lo sencillo que tiene el camino nuestra selección para clasificar, o en últimas para saber quién es el Capitán Nur. Entonces llega el desarrollo de la noticia.

SEGUNDO ACTO: ¡Por fin!, desarrollo de una noticia

Rescatado el capitán Leonardo Nur Rangel. El Ejército rescató este jueves en un paraje de la localidad de El Dovio (Valle), en límites con el Chocó, al capitán Leonardo Nur Rangel, secuestrado hace más de tres años por guerrilleros disidentes del Ejército de Liberación Nacional (Eln) y que había sido dado por muerto, según informó el general Freddy Padilla de León, comandante de las Fuerzas Militares. Entonces, en medio del bullicio el cerebro de Sumercé, la neurona, mete la cucharada, ¿cómo así?, ¿lo rescataron o no?

Mejor dicho ¿si hasta las fuerzas militares consideraban que estaba muerto, fue un rescate o un chiripazo? Ahora sí la embarramos, entre la neurona de Sumercé preguntando y el griterío, se vuelve casi imposible enterarse de lo que ocurre. Ah, bueno, algo se aclara, el ejército se enfrentó con el ELN, con los mismos que el gobierno está negociando en la Habana, dio de baja a un guerrillero y encontró un secuestrado, el capitán Nur. Mejor dicho, opina la inoportuna neurona, lo descubrió ahí de carambola, porque si lo imaginaban muerto nadie dirá que iban a liberarlo, ¿o me equivoco? Shhhhhh, calladita Sumercé, no piense, no pregunte que sigue el desarrollo de la noticia.

… Para la familia del capitán Leonardo Nur Rangel, su liberación fue algo más que un milagro. Agradecieron a las Fuerzas Militares y pidieron que las operaciones de rescate se extiendan a todos los secuestrados que tiene la guerrilla. Obvio, la familia que hasta entierro simbólico le había hecho, aboga por el rescate militar de todos los secuestrados. Rescatan a un secuestrado que no rescatan porque no iban por él, no podían ir por él porque lo creían muerto, opina la neurona, la familia recupera a un ser querido que consideraba muerto hacia años y… pues ¿qué sigue?, pedir al gobierno que proceda con el rescate militar de los otros secuestrados que se sabe, o por lo menos se imagina, están vivos y que no los encontrarían por carambola sino que en verdad irían por ellos. La cosa es… ¿los traerán vivos? Porque…Shhhhhh, ¡Sumercé!, que no deja oír.

El ELN afirma que no tenía a ningún capitán Nur secuestrado, que sí, aclaran las fuerzas militares, que se trata de un subgrupo, o una vaina así, del ELN, que se llaman algo con Guevara, debe ser por el Che, déjeme decir una cosita, ¿si?, está bien Sumercé hágale, pobre Che, además de camisetas, boinas, afiches, cualquiera coge su nombre para hacer lo que le venga en gana y a mí me parece, ¿era una cosita? No más. Entonces sigue la historia del grupo del ELN, que tampoco es del ELN, pero que igual mantuvo secuestrado durante casi cuatro años al Capitán sin pedir nada a cambio, porque dizque estaban tratando de negociarlo con las FARC, para que lo metieran en el enorme grupo de secuestrados con el que chantajean desde hace casi diez años al gobierno de turno.

TERCER ACTO: La neurona ataca de nuevo

Ay, esos bandidos, como les dice el Patrón, arranca otra vez la neurona metiche, no saben ni de negocios. ¿Gastarse casi cuatro años tratando de hacer un arreglo con las FARC pa salir del capitán y no poder? Hay qué ver lo incapaces que son. Y en esos años no intentaron algo distinto?, comunicarse con la familia, negociar con el gobierno, pedir rescate, alguna cosa de esas. Parece que no, pero si me deja oír le cuento, aunque de aquí a qué se sepa cómo fue la cosa y… menos con la memoria de Nur. No se acuerda de nada sobre el día de su secuestro. Lo único que sabe es que estaba en Cali y apareció en un barco donde lo tuvieron como un año, de ahí pasó a tierra firme y pues, un día se sumó a otro y este a otro hasta que lo rescató el ejército.

Ah, ah, interviene la neurona, no lo rescató porque no lo estaban buscando, pero sí lo rescató porque no estaba muerto, mejor dicho se lo encontró en el operativo, pero sí lo rescató porque Nur estaba encadenado. Uy, eso es espeluznante. Tenía una cadena gruesa, con candado, amarrada por encima de la bota pantanera que calzaba en el pie izquierdo. Y los del ejército, el colmo, no quitarle esa cadena de una buena vez. Porque Sumercé vio cuando aterrizaron en un aeropuerto y ahí, frente a las cámaras, rompieron el candado, debe ser que no tenían con qué cortar la cadena o el candado antes, Shhhhh Sumercé, deje oír.

Nur se tatuó el nombre en los brazos y el cuerpo para no morir como un NN, el tatuaje se ve fresquito porque es reciente. Lo hizo con una lata, dicen unos, con espinas de una penca, dicen otros, igual se tatuó en los últimos días, cuando estuvo seguro de que lo iban a matar. ¿Con una lata?, ay, terrible, eso se puede infectar y… Por favor Sumercé, calladita ¿si? El Capitán no sabía del nuevo gobierno de Uribe porque nunca oyó radio ni nada semejante.

Perdón, perdón pero tengo que decirlo, me alegro por él que no ha tenido que soportar los gritos de los locutores, pero ¿no saber nada de nada? Esa no la había oído nunca. Ni Fernando Araújo, el ex ministro que llevaba seis años secuestrado por las FARC, que también fue liberado, aunque tampoco fue liberado porque en realidad él aprovechó el combate entre la Fuerza pública y las FARC para escapar y luego estuvo perdido en las montañas durante cinco días, sin que la guerrilla (a Dios gracias) ni el mismo ejército lo encontraran, bueno, ni Araújo ha dicho lo del aislamiento total al extremo de no oír radio. Por el contrario, a la hora que comenzó la balacera Araújo estaba oyendo a Diana Uribe.

CUARTO ACTO: La neurona y Fernando Araújo, con los mismos gustos

Era domingo 31 de diciembre y, como todos los domingos, Diana Uribe, que en lugar de gritar usa los micrófonos de la radio para darnos unas clases de historia super encarretadoras, tenía al ex ministro y hasta a Sumercé entretenidos oyendo parte de la vida y muerte de Federico García Lorca. O sea, el ex ministro, por allá en los Montes de María y Sumercé por acá en la Sabana estaban conectados oyendo lo mismo, y fue en el instante que Diana Uribe hablaba de Lorca, del Franquismo y los horrores de esa época, cuando comenzó la pelotera y Araújo se armó de valor y se les voló a las FARC.

Cinco días estuvo perdi-escondido ¡Cinco días! La verdad, se me aguaran los ojos cuando lo vi en la TV. Con esa cara de miedo, de desconcierto, con esa delgadez extrema, los ojos hundidos, la mirada perturbada, el hipo que ni siquiera las amenazantes cámaras, los micrófonos, lograban quitarle, ¿cómo no se le iban a encharcar los ojos a Sumercé? Aunque, todo hay que confesarlo, se me encharcaron por él y por el soldadito, el Infante de Marina Tyron Almanza que murió en el enfrentamiento… Pobre, la familia diciendo que era el sostén de la casa…

QUINTO ACTO: Las predicciones de la neurona

No, Sumercé, así no se puede. ¿Va a dejar saber lo de Nur? ¿Entiende por qué comencé diciéndole que los amaneceres de la Hacienda me tienen mamada?, porque los hechos pasan tan rápido que uno no los entiende, pero además usted no me deja ni enterarme bien. Lo de Nur pasa volando, como voló la noticia de Yolanda Izquierdo, líder campesina representante de 700 campesinos desplazados, que estaba dispuesta a acusar a los paras y, aunque pidió protección por todos lados, la mataron hace como quince días en la puerta de su casa, la del soldadito que tiene la cara destrozada, la de la señora Carmen Cecilia Santana, víctima de los paramilitares, que los iba a denunciar y la mataron el miércoles 7 de febrero, en la puerta de su casa, igualitico a como mataron a la señora Izquierdo.

Ah, entonces cuál es la lora, ¿por qué quiere que la neurona se silencie si es la única que dice algo distintico?, no ve que aquí todo se repite. Uno hasta podría anunciar las muertes, como hacen las víctimas, se acuerda del alcalde que le dijo en un Consejo Comunitario a Uribe, "Presidente, a mí me van a matar", ¿y? eso fue en marzo de 2003, acuérdese, ¿y qué pasó? pues a los diítas, el 5 de abril, lo mataron. Creo que se llamaba Eudaldo Díaz. Así ¿cuál es la gracia de presagiar las muertes?, no ve que aquí día tras día, mes tras mes, año tras año todo se repite. Sólo pasa lo mismo. Así que cuente los asesinatos del año pasado y calcule cuántos nos faltan para este año. Y apague ese radio, que estoy mamada de oír lo mismo, mismo… Ahora la gran novedad serán los rescates militares que no son rescates, porque unos se fugan y otros se ignoraba que estaban secuestrados. Esa será la gran novedad, pero yo le puedo contar lo que sigue.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Mi querida S:

Con lo de la foto modificada, sumerce inicia el proceso de salir del anonimato?, al principio pensé que lo que después entendí como neuronas era una suerte de corona como la famosa de espinas del simpático judio aquel.
Mis neuronas también se activaron recientemente, con la noticia que a Fernando Araujo (el fugado) lo quieren postular que dizque pa alcalde de mi bella Cartagena, cuando él fue uno de los principales actores de la película de Chambacú, en donde se tumbaron unos terrenitos y desalojaron a unos negritos de un sitio donde supuestamente iban a hacer un parque y que finalmente los cojieron para hacer una urbanización.
Fernandito se salvó del proceso por encontrarse ensecuestrado, pero como acá no trascienden estos hechos lo más normal es que el próximo año veamos al exministro a la cabeza de la Heróica.

G

Anónimo dijo...

Sencillamente genial. Genial.

Anónimo dijo...

Es que eres muy bruta, eso es lo que pasa....pa qué tanta preguntadera? Las noticias son clarísisisimas ;)

Anónimo dijo...

mis neuronas querrían opinar con mayor
profundidad y más frecuencia, pero no acato a tanto. Se le informa a la sumercé que de lo
que leí, estoy totalmente de acuerdo con el fastidio por la gritadera, del asco profundo
por el señor uribe (con minúscula, como lo escribió el finado periodista Cano, por
supuesto fallecido por causas violentas, así el final sea paro cardiorrespiratorio -ver
artículo de Coronel de Semana de hace algunas semanas. En cambio a Sumercé se le fue el
pablo de JUAN PABLO MONTOYA con minúscula). Y con todo lo demás.
Sumercé, si quiere adjunte a sus comentarios de su blog esta opinión a la carrera, porque
además los links no funcionan en este momento.
Saludes a los colombianos que habitan en su casa de habitación y a los vecinos. Que en lo
que sí no estoy de acuerdo es con que esto sea una hacienda. Esto es un despelote en vías
de desarrollar más despelote.
Me suscribo para seguir en cosas más prosaicas,