martes, junio 21, 2005

LAS BUENAS NOTICIAS DEL ENTRETENIMIENTO

En la sección de las buenas noticias del entretenimiento, léase farándula, que sí, ahí mismo, pasaron la noticia de la tortura a la que se ha visto sometido por lo menos uno de los prisioneros iraquíes en Guantánamo. Y, cómo lo informaron? Pues como se informa en una sección de farándula.


Mientras el maestro Fernando Botero se empeña en derrotar el olvido, con su obra plástica, respecto a un acto tan inhumano como el de la tortura que militares norteamericanos infligieron a los detenidos en la prisión iraquí de Abu Ghraib, aquí, en su tierra natal, ¡qué pena maestro!, la noticia sobre las torturas de prisioneros iraquíes en Guantánamo sólo da para la sección de farándula de un noticiero de televisión.

Ya uno, o bueno una, es decir Sumercé no sabe ni qué pensar de los sucesos que ocurren en la hacienda Colombia y mucho menos del tratamiento que les dan los noticieros de televisión. Harto se ha dicho que aquí las noticias pasan de una masacre a un partido de fútbol sin transición. Y del partido de fútbol a las siliconadas presentadoras de noticias del entretenimiento con menos transición aún. Todo ello quizá con la inocente pretensión de mandarnos a dormir con una sonrisa en los labios y no con el trauma, o la conciencia, que debería despertarnos el enterarnos del desastre que vivimos. Sí, pensemos que la intención es sana, pero lo de RCN anoche en aras de convertir lo definitivamente atroz en frivolidad, si fue ¡la tapa!

En la sección de las buenas noticias del entretenimiento, léase farándula, que sí, ahí mismo, pasaron la noticia de la tortura a la que se ha visto sometido por lo menos uno de los prisioneros iraquíes en Guantánamo. Y, cómo lo informaron? Pues como se informa en una sección de farándula. El cuento según dijo la voz femenina que lo relataba tenía que ver con que una cantante llamada Cristina Aguilera había alcanzado a Shakira en sus niveles de popularidad ni más ni menos que en Guantánamo. Según dijo esta voz un detenido de “apellido impronunciable”, mejor dicho árabe, denunció que se le había sometido a escuchar las canciones de Cristina Aguilera, para mantenerlo despierto durante horas. Mejor dicho, para T O R T U R A R L O. Suceso que entre chiste y chanza relató la voz femenina en off, como algo simpatiquísimo, pues gracias a ello por lo menos para uno de los prisioneros de Guantánamo, la Aguilera contaba con el mismo nivel de popularidad que Shakira con su disco La Tortura. Y no, ¡qué risa!

Porque sí, con risita y tal la encantadora presentadora de las buenas noticias del entretenimiento que estaba frente a nuestras pantallas, celebró el que Cristina Aguilera y Shakira tuvieran la misma popularidad en Guantánamo. Je, je, je, ¡qué chistoso! Y todo por un prisionero de eso árabes de “apellido impronunciable”, je, je, ¿podrá haber algo más divertido?

Está visto que el maestro Botero, que hace años no vive en la hacienda Colombia, mantiene intacta su capacidad de asombro y de conmoción frente a hechos que a cualquier persona deben conmover. A cualquiera sí, salvo que esa persona habite en la hacienda Colombia y por tanto sus sentimientos de dolor, rabia, terror frente al padecimiento de sus semejantes, hayan sucumbido en el mare mágnum de buenas noticias del entretenimiento, con el que se sepulta la sangre y la injusticia que, je, je, je, siguen corriendo por Colombia y el mundo.

Así que “un besito” y… “piensen en mí” o “hagan el bien sin mirar a quién”, como dicen algunas de nuestras brillantes presentadoras de farándula y eso sí, no olviden sonreír… que je, je, je, Shakira y la Aguilera son famosas por lo mismo: La Tortura. ¿No es genial?


Junio 22 de 2005


Nota: y por cualquier cosa aquí va una de las obras del maestro Botero para los que estén interesados en ir más allá del puro entretenimiento.

No hay comentarios.: