Pase lo que pase no pasa nada

Excavaciones, cientos, miles de restos de personas asesinadas que aparecen en fosas comunes dispersas por todo el país. La noticia espanta. Pero, como de costumbre, no pasa nada. El patroncito viaja donde el gran patrón a pedir cacao, la visita no surte el efecto esperado por quienes consideraban que si el patroncito cogía el toro por los cachos (es decir, al congreso norteamericano como en Consejo Comunal), la aprobación del TLC, la autorización del desembolso para el famoso Plan Colombia eran pan comido, pero resulta que… no. A los gringuitos lo del Consejo Comunal internacional no los convenció. Y… no pasa nada.

Esa es la constante de la historia de la Jinca, hasta en slogan debería convertirse. Como es de fácil recordación podríamos promocionar este terruño como: La Jinca Colombia, un lugar donde pase lo que pase no pasa nada.

Nueve, ocho, siete, seis, cinco, cuatro, tres años llevan los secuestrados en poder de las FARC, los Paras no tienen secuestrados. Según sus declaraciones ellos no secuestraban, a todas las personas que se llevaron los mataron. En fin, miles de secuestrados, de fosas comunes en esta jinca y NO PASA NADA.

Imposible despejar Pradera y Florida, pero posible como dijo nuestro brillante y santo Mindefensa: hacer el acuerdo humanitario hasta por teléfono… Sin embargo, lo peor para Sumercé no son las talanqueras del gobierno y las FARC para regresar a la vida, a la dignidad, a los secuestrados y a sus familias. Lo peor es la indiferencia de la gran mayoría de colombianos que confirman el slogan de la Jinca, Pase lo que pase no pasa nada. Slogan al que habría que agregarle, respecto a los colombianos que siguen su vida tranquilitos, ignorando la realidad de los secuestrados, las fosas comunes, ¿y eso a quién le importa?

En estos días Julito denunciaba en la doble W que un grupo de vecinos del Chicó quería ganarse el premio a la falta de solidaridad porque se oponían a la realización, en un parque público, de un evento creado para recaudar fondos destinados a los familiares de policías caídos en combate. Y Sumercé pensaba, pero si ese premio hace años lo ganaron la mayoría de colombianos. Será que Julito hablaba de optar por el primer lugar, porque ignora que hace mucho rato los millones de indiferentes e indolentes colombianos se apropiaron de ese puesto en cualquier concurso donde se elijan ganadores en lo que a falta de solidaridad se refiere.

Vaya uno a saberlo, igual en centros comerciales, restaurantes. parques de diversión, bares, colegios, en la calle en general Sumercé sólo ve gente radiante, feliz, muy feliz. Personas a las que seguramente ni las fosas comunes y menos los secuestrados podrán borrarles la sonrisa con la que celebran vivir en una Jinca donde pase lo que pase no pasa nada.